La Prevención del Cáncer de Piel



El cáncer es una de las enfermedades más temidas, ya que por medio de su acción y desarrollo ha logrado cobrar de la vida de millones de personas alrededor del mundo.

El carcinoma más común en Estados Unidos es el cáncer de piel, siendo el más peligroso de entre todos sus subtipos el melanoma.

En mayo fue el mes de la Prevención de Cáncer de Piel, razón por la cual distintas autoridades y medios han tomado la iniciativa de compartir y difundir diversas herramientas para evitar el alcance de esta patología. Según explican los expertos, esta enfermedad es altamente prevenible y potencialmente curable si se le da el diagnóstico y tratamiento oportuno; de manera que la clave para poder salir airosos de ella es necesario poner en práctica estas sencillas pero sumamente importantes y eficaces recomendaciones:

1. Limita tu exposición a los rayos ultravioleta (UV)

La forma más importante de reducir el riesgo de melanoma es protegerse de la exposición a los rayos UV cuya principal fuente es el sol. Lleve a cabo las medidas de protección necesarias al estar al aire libre.

2. Usa protector solar y accesorios como sombreros para prevenir

El uso de protector solar es vital para prevenir el cáncer de piel; el producto debe tener al menos un nivel 30 de Factor de protección solar SPF, además de ser resistente al agua y lo ideal es utilizarlo cada dos horas.

Otra herramienta con la que podemos prevenir la exposición, es el uso de accesorios como Sombreros con Protección Solar que ayudan a prevenir el 98% de la incidencia de los rayos uv sobre la piel; siempre teniendo en cuenta que el horario de mayor exposición es el comprendido entre las 10 am y 4 pm, procurando además siempre transitar por lugares donde haya sombra.

3. Protege a los niños del sol

Los niños necesitan especial atención, ya que éstos tienden a pasar más tiempo al aire libre y pueden quemarse más fácilmente. Los padres y las personas que cuidan de los niños deben protegerlos de la exposición excesiva al sol con los pasos descritos anteriormente. A los niños hay que orientarlos sobre los daños que causa demasiada exposición solar a medida que se vayan haciendo más independientes.
La mayoría de enfermedades cutáneas surgen en la edad adulta pero se producen principalmente por las exposiciones que se realizaron antes de los 18 años, ya que el daño en la piel se va acumulando. Por eso es fundamental la prevención desde la infancia.

4. Evita las camas bronceadoras y las lámparas de sol

Muchas personas creen que los rayos UV de las camas bronceadoras no son perjudiciales, pero esto no es cierto. Las lámparas bronceadoras emiten  rayos UV que pueden causar daños a la piel a largo plazo, y contribuir al cáncer de piel.

El uso de camas bronceadoras ha sido asociado a un riesgo aumentado de melanoma, especialmente si se comenzó a usar estas camas antes de que la persona cumpliera 30 años de edad. La mayoría de los dermatólogos  y organizaciones de la salud no recomienda el uso de las camas bronceadoras ni las lámparas de sol.

5. Presta atención a lunares anormales

Examinar la piel regularmente puede ayudar a identificar cualquier lunar u otro crecimiento nuevo o anormal. Pida a su médico que lo examine antes de que tenga la probabilidad de convertirse en cáncer de piel. Ciertos tipos de lunares son más propensos a convertirse en melanoma. Si usted presenta lunares, dependiendo de la apariencia, puede que su médico quiera observarlos minuciosamente mediante exámenes periódicos o puede extirpar algunos de ellos si tienen características que sugieren que podrían convertirse en melanoma.

6. Evita debilitar el sistema inmunitario

Tener un sistema inmunitario debilitado aumenta el riesgo de padecer melanoma y otros tipos de cáncer de piel. Algunas personas necesitan tomar medicamentos para suprimir sus sistemas inmunitarios. Esto incluye personas que han tenido trasplantes de órganos y algunas personas con enfermedades autoinmunitarias. Las personas que padecen cáncer también necesitan tomar medicamentos, como la quimioterapia, que pueden disminuir la función inmunitaria. 
El consumo de vitamina D puede colaborar con la salud de tu piel, haciéndola menos propensa al desarrollo de cualquier enfermedad.

Según los datos aportados por la Academia Americana de Dermatología (AAD), 1 de cada 5 desarrolla en algún momento de su vida cáncer de piel, siendo diagnosticados con esta patología un aproximado de 9,500 personas diariamente, sólo en Estados Unidos.

Es de vital importancia que tomemos conciencia y apliquemos en nuestro día a día estos sencillos tips que toman unos minutos pero que pueden otorgarnos toda una vida.